Cómo gestionar tus finanzas personales.
Robert Kiyosaki tuvo dos padres: uno rico y otro pobre.
Uno de ellos tenía una sólida preparación académica. Tenía un doctorado y realizó sus estudios más avanzados en diversas universidades, todo ello con becas. El otro padre no pasó de segundo de secundaria.
Ambos tuvieron éxito en sus carreras y trabajaron con ahínco durante toda su vida. No obstante, uno siempre batalló en las finanzas y el otro llegó a ser uno de los hombres más ricos de Hawai.
Si él hubiera tenido un solo padre, hubiese aceptado sus sugerencias y repetido patrones. Pero al tener dos padres, le dio la oportunidad de comparar sus puntos de vista: el de un hombre rico contra el de uno pobre.
Uno de sus padres decía: El amor por el dinero es la raíz de todos los males. Sin embargo, el otro afirmaba que el no tener dinero era la raíz de todos los males.
Casi todos aprendemos de nuestros padres lo que sabemos sobre el dinero, pero ¿qué puede un padre pobre enseñar a su hijo sobre este tema? Por ejemplo: padre pobre le decía: No puedo permitirme ese lujo. Padre rico le prohibió decir esa frase, ya que pensaba que detrás de esta frase, existía una flojera mental y le instó a que se preguntara: ¿Qué puedo hacer yo para darme ese lujo?
Uno le decía: “Estudia mucho para que puedas conseguir empleo en una empresa importante” y el otro le recomendaba: “Estudia mucho para que encuentres una empresa importante y puedas adquirirla”.
Uno decía: No he podido hacerme rico porque os tengo a vosotros, hijos. El otro afirmaba: Debo ser millonario porque os tengo a vosotros, hijos.
Uno no quería hablar de dinero y negocios a la hora de la cena y el otro le alentaba a tocar esos temas en la mesa.
El padre pobre siempre decía: Jamás seré rico y su profecía se hizo realidad. El padre rico, por otra parte, siempre hablaba de sí mismo como una persona adinerada. Decía cosas como: Soy rico, y los ricos no hacen eso. A pesar de que después cayó en bancarrota, pero existe una gran diferencia entre ser pobre y estar en la bancarrota. La bancarrota es temporal, la pobreza, eterna.
Ambos tenían un gran respeto por la educación, pero discrepaban por la materia a aprender. Uno quería que estudiara mucho, que tuviera un título, que consiguiera un buen empleo y ganara dinero. El otro le animó a estudiar cómo funciona el dinero y cómo conseguir que éste trabajara para él.
Lección 1: Los ricos no trabajan para obtener dinero. Los pobres y la gente de la clase media trabajan para obtener dinero. Los ricos, en cambio, hacen que el dinero trabaje para ellos.
Hay dos emociones que siempre controlan la vida de la gente: el miedo y la codicia.
Casi todas las personas tenemos un precio. Lo tenemos porque el miedo y la codicia se apodera de nosotros. El miedo a no tener dinero nos motiva a trabajar duro por dinero. Y una vez que obtenemos la paga: la codicia nos hace pensar en todas las cosas maravillosas que se pueden comprar con el dinero y entonces se establece el patrón.
¿Qué patrón?
El patrón de levantarse, ir a trabajar, pagar recibos, y otra vez, levantarte, ir a trabajar y pagar recibos. Si tienes más dinero, también continuarás el ciclo porque gastarás más. A esto el autor le llama la Carrera de la rata.
Las personas en vez de actuar con cabeza, dejamos que las emociones nos superen. En lugar de preguntarnos, cómo nos sentimos con este tipo de vida y decirnos la verdad a nosotros mismos. Preferimos no pensar y como tenemos miedo, nos vamos a trabajar con la esperanza de que nuestro sueldo nos apacigüe el temor. El miedo nos mantiene en esta trampa. El dinero rige nuestras vidas y nos negamos a aceptarlo.
Otra emoción implicada es el deseo, otros le llaman “avaricia”. El deseo también hace que vayamos a trabajar para obtener dinero. Muchos deseamos conseguir dinero porque creemos que con él podemos comprar la felicidad. Sin embargo, la felicidad que trae el dinero dura muy poco. Entonces las personas necesitan más dinero para conseguir más felicidad, placer, comodidad y seguridad. Continúan trabajando y creyendo que el dinero aliviará sus almas del miedo y el deseo que las habita, pero esto no es posible.
¿También la gente rica hace esto?
Sí, también lo hacen. Lo hace la gente rica que no es rica de verdad, que ya poseen millones, pero ahora tienen más miedo que cuando eran pobres. Temen perderlo todo. Los miedos que les condujeron a hacerse ricos se intensificaron una vez que lo consiguieron.
Muchos tienen fuertes problemas emocionales y son neuróticos a pesar de que tienen más dinero. Eludir el dinero es algo tan triste como vivir apegado a él.
Hay mucha gente que dice que el dinero no le interesa y, sin embargo, trabajan ocho o más horas seguidas al día para conseguir este dinero.
Lo ideal es ser honestos con estas emociones de las que acabamos de hablar y usarlas, junto con nuestra mente, en nuestro propio beneficio, y no en contra nuestra.
Es como la imagen del burro que arrastra una carreta mientras el dueño mantiene una zanahoria colgando frente a su hocico. Tal vez el dueño va a donde quiere ir, pero el burrito solo persigue una ilusión, un engaño.
Cuando nos imaginamos un coche nuevo o una casa más grande, somos ese burrito y la zanahoria es eso que anhelamos para impresionar a nuestros vecinos y amigos.
Reflexionad sobre que conforme nos pasan los años, más grandes y caros son nuestros deseos y mayor es la trampa.
Si el burrito pudiera ver el panorama completo, tal vez se lo pensaría dos veces al perseguir la zanahoria.
La escuela es muy importante, ahí vamos a aprender una profesión que nos convertirá en miembros productivos de nuestra sociedad. Todas las culturas necesitan maestros, abogados, cocineros, policías, gente de negocio, mecánicos, bomberos… Por desgracia, mucha gente considera que la escuela es el final y no el principio.
Tal vez haya sido un poco cruel el ejemplo del burrito, pero nos dice Kiyosaki que más cruel es pasar toda tu vida con miedo y nunca perseguir tus sueños. Trabajar con gran empeño para obtener dinero porque piensas que con él podrás comprar cosas que te harán feliz también es un poco cruel. Eso no es vida y es la trampa que quiere que evitemos.
No permitáis que eso os suceda, no dejéis que el miedo tome el control.
Tenéis que ver lo que otros no ven.
Lección 2: ¿Por qué enseñar educación financiera?
No se trata de cuánto dinero hagas. Se trata de cuánto dinero guardas.
A Kiyosaki le preocupa que haya tanta gente concentrada en el dinero en lugar de en su educación. Si la gente está preparada para ser flexible y adaptarse a los grandes cambios de la vida, para mantener la mente abierta y para aprender, le será más fácil hacerse cada vez más rica a pesar de la rudeza de los cambios. Pero si cree que el dinero resolverá sus problemas, se enfrentará a muchas dificultades.
La inteligencia resuelve los problemas y produce dinero, pero el dinero sin inteligencia financiera es dinero que desaparece pronto.
La mayoría no comprende que en la vida no se trata de cuánto dinero ganes, sino de cuánto dinero guardes. Todos hemos escuchado historias acerca de ganadores de lotería que era pobres, se hicieron ricos y volvieron a ser pobres.
Si vas a construir el edificio del Empire State, lo primero que tienes que hacer es cavar un agujero enorme y rellenarlo con materiales resistentes. En su deseo de hacerse rica rápidamente, la gente trata de construir el Empire State sobre una placa de quince centímetros.
La base del aprendizaje es saber de contabilidad, es posible que esta materia sea confusa y aburrida, pero también es la más importante.
¿Sabes algo de contabilidad? ¿Sabes que es un activo y un pasivo?
Los ricos adquieren activos. Los pobres y la clase media adquieren pasivos que consideran activos.
Regla 1: Debes conocer la diferencia entre un activo y un pasivo, y adquirir activos.
Lo que define a un activo no son las palabras, sino las cifras. Y si no podéis leer cifras, entonces tampoco podréis distinguir un activo de un agujero en el suelo.
Un activo pone dinero en mi bolsillo. Un pasivo saca dinero de él.
En la contabilidad, lo importante no son los números sino lo que éstos te dicen. Es como las palabras, las palabras por sí solas no te dicen nada, lo que importa es la historia que te cuentan ese conjunto de palabras.
Si quieres ser rico, tienes que saber leer y entender los números.
Nos cuenta Kiyosaki que con frecuencia escucha cosas como: Estoy endeudado, por eso tengo que ganar más dinero.
Sin embargo, contar con más dinero no resolverá el problema. De hecho, puede incluso hacerlo más complejo. El dinero pone en evidencia nuestros trágicos fallos humanos y señala aquello que desconocemos de nosotros mismos.
El flujo de efectivo cuenta la historia de cómo las personas manejan su dinero.
Debido a que los estudiantes abandonan la escuela sin habilidades financieras, millones de personas con preparación académica logran ejercer su profesión con éxito, pero más delante siempre afrontan problemas económicos.
Lo que le hace falta es el conocimiento de sobre cómo ganar dinero, sino sobre cómo manejarlo. A esto se le llama aptitud financiera. Es lo que haces con el dinero en cuanto lo recibes, cómo evitar que otros te lo quiten, saber conservarlo por más tiempo y ´como hacer que trabaje intensamente para ti.
La búsqueda del sueño financiero se convierte en pesadilla.
La típica historia de personas que trabajan con ahínco es la de la pareja de jóvenes que se van a vivir de alquiler. Como ganan dos sueldos, de los cuales los impuestos representan los mayores gastos, como son el impuesto sobre la renta y el de la seguridad social. Cuanto más ganan, más pagan. El ingreso está sujeto a más impuestos, pero no necesariamente implica mayor poder adquisitivo. Pues, el pisito se les queda pequeño y, deciden comprarse la casa que han soñado. Cuando están en ella, tienen que pagar un nuevo impuesto sobre bienes inmuebles. Luego la pareja se compra un coche nuevo, muebles y enseres que vayan acorde a su nueva casa. De repente la pareja despierta y descubre que su columna de pasivos está repleta de deudas por hipoteca y tarjetas de crédito. Los pasivos se incrementaron.
En resumen, tomar la decisión de poseer una casa demasiado costosa en lugar de comenzar una cartera de inversiones tiene un terrible impacto sobre los individuos. Con esto, Kiyosaki no nos dice que no debamos comprarnos una casa. Lo que quiere que entendamos es la diferencia entre un activo y un pasivo. Si yo quiero una casa más grande, primero debo adquirir activos que generen el flujo de efectivo para pagarla.
¿Por qué los ricos se vuelven más ricos? La columna de activos genera ingresos más que suficientes para cubrir los gastos. Los activos siguen creciendo y los ingresos que producen también se multiplican. Como resultado, ¡los ricos se vuelven más ricos!
Si eres empleado y tienes una casa, el esfuerzo que inviertes en trabajar se organiza así:
- Trabajo para la empresa. Los empleados hacen que quien se enriquezca sea el dueño del negocio, pero nunca tú mismo.
- Trabajo para el gobierno. El gobierno retiene su tajada de tu nómina incluso antes de que le pongas las manos encima. El trabajo que realiza la mayoría de gente de enero a mayo es para cubrir lo que tiene que pagarle al gobierno.
- Trabajo para el banco. Después de pagar impuestos, nuestro mayor gasto corresponde al pago de hipoteca y las deudas de las tarjetas de crédito.
Los ricos compran activos. Los pobres solo incurren en gastos.
Lección 3: Ocúpate de tu propio negocio.
¿A qué negocio me dedico?
Cada vez que nos dice que debes ocuparte de tu negocio, se refiere a que tenemos que construir nuestra columna de activos y mantenerla fuerte.
No renuncies a tu empleo, pero comienza a comprar activos. Deja de adquirir pasivos o efectos personales que pierden su valor real en cuento los llevas a casa.
Mantén tus gastos bajos, reduce los pasivos y, con mucha disciplina, ve construyendo una base de activos sólidos.
¿Qué tipo de activos?
- Negocios que no exigen tu presencia. Yo soy el dueño, pero otras personas lo administran.
- Acciones.
- Bonos.
- Bienes inmuebles que generen ingresos.
- Pagarés (o notas de deuda). Derechos de autor en concepto de propiedad intelectual como música, guiones y patentes.
- Cualquier cosa que tenga valor, que te genere ingresos.
Por otro lado, no nos recomienda que fundemos una empresa a menos que de verdad quiera hacerlo.
Lección 4: La historia de los Impuestos y del poder de las corporaciones.
Padre rico sólo jugó el juego con inteligencia y lo hizo a través de corporaciones: el secreto más importante de los ricos.
El conocimiento de la estructura legal corporativa es lo que en realidad les concede a los ricos una amplia ventaja por encima de los pobres y de la clase media.
Los ricos se han refugiado en la protección que se recibe al pertenecer a una corporación. Ésta es un expediente con algunos documentos legales, que permanece en la oficina de algún abogado y que se tiene que registrar en una institución del Estado. La empresa no es un gran edificio, una fábrica o un grupo de gente. Es un documento que permite la creación de una entidad legal que no tiene alma.
Son muy populares porque la tasa impositiva para las empresas es menor que la que se aplica a los individuos. Además, ciertos gastos de las empresas se podían pagar con dinero sobre el que todavía no se habían pagado impuestos.
El problema es que, quienes siempre pierden son los que no están bien informados: aquellos que todos los días se levantan y con toda diligencia va a trabajar y a pagar impuestos. Si entendieran la forma en que los ricos juegan el juego, también podrían hacerlo. Y entonces se encaminarían hacia su independencia financiera.
Cada vez que se trata de castigar a los ricos, éstos se defiende. Reaccionan. Porque tienen dinero y poder, y la intención de cambiar las cosas. Los ricos no se cruzan de brazos, listos a pagar más impuestos. En lugar de eso, buscan la manera de minimizar la carga fiscal. Contratan abogados y contables muy hábiles y persuaden a los políticos a cambiar las leyes o de soslayar lagunas legales.
Los ricos utilizan sus recursos para efectuar cambios.
Por desgracia los pobres y la clase media o cuentan con los mismos recursos. Simplemente se quedan quietos y permiten que el gobierno les pinche sus agujas en los brazos para succionarles la sangre.
Está claro que el conocimiento es poder. Además, cuando unto tiene dinero también posee un gran poder que exige tener el conocimiento adecuado para saber conservarlo y multiplicarlo. Si careces de ese conocimiento, todo el mundo podrá mangonearte.
La primera lección que te ayuda a hacer que el dinero trabaje para ti en lugar de que tú trabajes para él, tiene que ver con el poder. Si trabajas para el dinero, para obtenerlo, le cedes el poder a tu jefe. Si haces que el dinero trabaje para ti, puedes conservar el poder y controlarlo.
Muchos empleadores creen que es una mala idea para la empresa recomendar a sus empleados que tengan un negocio propio; sin embargo, el hecho de tener una empresa propia, y de desarrollar activos, me convirtió en mejor empleado porque, de pronto, tuve un objetivo. Llegaba temprano a trabajar a Xerox, lo hacía con mucho ahínco. Estaba intentando juntar la mayor cantidad posible de dinero para invertir en inmuebles. Cuantas más fotocopiadoras vendía, más dinero ganaba, y naturalmente, más me quitaban en concepto de de impuestos. Era muy inspirador. Así que trabajaba aún con más ganas para poder invertir más.
Mis compañeros vendedores de Xerox creyeron que yo usaba mis comisiones para darme caprichos, pero no, las comisiones también las estaba invirtiendo en activos.
El dinero que ganaba estaba trabajando con mucho empeño para generar más dinero. Cada dólar de mi columna de activos se comportaba como un gran empleado. Entonces yo trabajaba para Xerox con más ganas para generar más empleados en mi negocio de activos.
En resumen:
- Dueños de negocios con corporaciones:
- Ganan
- Gastan
- Pagan impuestos
- Empleados que trabajan para corporaciones:
- Ganan
- Pagan impuestos
- Gastan
Lección 5: Los ricos inventan el dinero
Con frecuencia, quienes prosperan en el mundo real no son los inteligentes sino los temerarios.
En cuanto dejamos la escuela descubrimos que los títulos académicos y las buenas calificaciones no son lo que más importa. En el mundo real, fuera de las universidades, se requiere algo más. He escuchado a la gente llamarle de muchas formas: agallas, valor, temeridad, audacia, desenfado, tenacidad e inteligencia. Este factor, como quiera que se le llame, es el que, al final decide el futuro de uno por encima de las calificaciones escolares.
El miedo excesivo y la falta de confianza en uno mismo eran los dos elementos que más limitaban el genio de cada individuo.
Con frecuencia, quienes avanzan en el mundo real no son los inteligentes, sino los temerarios.
El genio financiero exige tanto conocimiento técnico como valentía. Kiyosaki recomienda a la gente que aprendan a correr riesgos y a permitir que su genio transforme el miedo en poder y lucidez. A unos les funciona y a otros les aterra.
Verás, nos esperan muchos cambios en el futuro. En los próximos años, surgirán en todo el mundo empresas de éxito abrumador. Por otra parte, habrá más gente y negocios que irán a la bancarrota; habrá más despidos y recortes.
Pero Kiyosaki prefiere no pensar en esto último y abrirle los brazos al cambio en lugar de temerlo.
Hoy en día vemos a mucha gente que se pasa la vida batallando. Que trabaja más sólo por aferrarse a ideas rancias. Se resiste al cambio y quiere que las cosas sean como antes. Sé de personas que pierden sus empleos o sus casas, y culpan a la tecnología, a la economía o a sus jefes. Por desgracia, no se dan cuenta de que el problema son ellas mismas. Las ideas viejas se vuelven su mayor pasivo, pues no logran ver que, si bien en el pasado esas mismas nociones eran activos, en el pasado se ha ido ya.
La mente es el activo más poderoso que tenemos. Si la entrenamos bien, puede producir una enorme riqueza en lo que parecerá solo un instante. Asimismo, una mente no entrenada puede producir el tipo de pobreza extrema que podría destruir a una familia durante generaciones.
En la Era de la Información, el dinero crece de manera exponencial. Algunas personas se están volviendo ridículamente millonarias de la nada. Sólo manejan ideas y contratos.
Mucha de la gente que maneja acciones o hace otro tipo de inversiones para vivir, te podría decir que ve que esto sucede todo el tiempo porque en realidad sí es posible hacer millones instantáneamente de la nada. Y con nada. Es decir, sin intercambio de dinero físico.
Todo se hace por medio de contratos y acuerdos: una señal con la mano de un corredor de la bolsa de valores, un parpadeo en la pantalla de los corredores en Lisboa, enviado desde la pantalla de alguien en Toronto, y luego de vuelta a Lisboa; una llamada a mi corredor para que compre acciones y, unos instantes después, las venda. El dinero no cambió de manos. Sólo fueron acuerdos.
Kiyosaki nos da un ejemplo sencillo de cómo se hace dinero. A principio de los 90, la economía de Arizona, era deplorable. Las condiciones del mercado eran perfectas para los inversores. Él tenía buena parte de su capital invertido en el mercado de valores y en edificios de apartamentos. Casi no tenía liquidez.
Casas que alguna vez valieron 100.000 dólares se vendían por 75.000. Sin embargo, en lugar de comprar con los agentes inmobiliarios locales, empezó a adquirir los inmuebles en las oficinas de abogados especializados en desahucios y en la entrada a los juzgados.
En esos lugares, una casa de 75.000 dólares podía legar a ser comprada por 20.000 o menos. Le pidió a un amigo 2.000 dólares por 90 días a un interés de 200 dólares. Con este dinero le dio un cheque de caja a un abogado para que lo tomara como señal. Mientras se llevaba a cabo el proceso de adquisición, puso un anuncio en el periódico en el que ofrecía una casa con un valor de 75.000 dólares por sólo 60.000 y sin señal. El teléfono no le dejó de sonar.
El inmueble se vendió en minutos. El comprador lo pagó con gusto. Le pagó a su amigo los 2.000 dólares más los 200 dólares de los intereses. Y él acababa de vender una casa que le costó 20.000 dólares por 60.000.
¿Qué te suena más difícil?
- Trabajar duro. Pagar el 50% en impuestos. Ahorrar lo que te queda. Que tus ahorros ganen el 5%, por el que también pagarás impuestos.
O
- Invertir tiempo para desarrollar tu inteligencia financiera. Dominar el poder de tu cerebro y de la columna de activos.
La filosofía de Kiyosaki consiste en plantar semillas en la columna de activos. Ésa es la fórmula. Comienzo con poquito y planto semillas. Algunas de ellas crecen y otras, no.
Si sabes bien qué haces, entonces no es como si estuvieras apostando. Apostar es meter dinero a un negocio y ponerse a rezar para que el azar te favorezca.
Su base personal son los bienes raíces. A él le encantan los inmuebles porque son estables y se mueven con lentitud.
Lo mejor de contar con una base fuerte de bienes raíces es que le permite correr riesgos mayores, como lo hace con las acciones especulativas.
Las grandes oportunidades no se ven con los ojos sino con la mente. La mayoría de la gente no se hace rica nunca porque no está entrenada en el aspecto financiero para reconocer oportunidades que están justo frente a ella.
Lección 6: Trabaja para aprender. No trabajes por dinero.
La seguridad en el empleo lo era todo para padre pobre. Para padre rico, lo más importante era el aprendizaje.
Si no estás dispuesto a trabajar para aprender algo nuevo, y en lugar de eso insistes en especializarte a un alto nivel en tu ramo, asegúrate de que en la compañía para la que trabajes haya sindicato. Los sindicatos fueron creados para proteger a los especialistas.
El mundo está repleto de personas pobres con gran talento. Muy a menudo carecen de medios, luchan en el aspecto económico o ganan menos de lo que podrían, no por lo que saben, sino por lo que ignoran. Se concentran en perfeccionar las habilidades que les sirven para realizar mejor su trabajo, pero no desarrollan las que les permitirán vender mejor ese trabajo a sus posibles clientes.
Las habilidades especializadas más importantes son ventas y marketing. La habilidad de vender (es decir, de comunicarse con otro ser humano, ya sea un cliente, empleado, jefe, esposo o hijo) es la base del éxito personal.
Las habilidades de comunicación como escribir, hablar y negociar son fundamentales para tener una vida llena de triunfos.
Lección 7: cómo vencer los obstáculos.
La principal diferencia entre una persona rica y una pobre es la forma que manejan el miedo.
A la gente le da tanto miedo a perder, que de todas formas pierde antes de jugar, nos dice en el libro.
Ganar es no tener miedo a perder y el éxito llega después de haber perdido.
La gente no tiene éxito económico porque su miedo a perder dinero es mucho mayor que su anhelo de hacerse rica.
Perder inspira a los ganadores. Y a los perdedores, los vence.
Si deseas hacerte rico, tienes que enfocarte y no hacer lo mismo que los pobres y la clase media, que ponen algunos huevos en muchas cestas. Coloca muchos huevos enpocas cestas y enfócate.
Si odias perder, entonces juega a lo seguro. Si perder te debilita, no te arriesgues. Solo invierte de manera equilibrada. Juega a lo seguro, pero empieza pronto. Comienza a acumular huevos en el nido lo antes posible porque te llevará más tiempo.
Si sueñas con escapar de la carrera de la rata, no renuncies a tu empleo. Compra bonos y fondos de inversión.
Acumular activos es algo sencillo. Es un juego que no requiere de grandes aptitudes ni mucha información. Se requiere agallas, paciencia y una personalidad dispuesta a lidiar con el fracaso.
Lección 8. Cómo empezar.
Hay oro en casi todas partes. Pero casi nadie sabe cómo identificarlo para ello tienes que:
1.Encuentra una razón que sea más grande que la realidad: el poder del espírituo. ¿Por qué quieres salir de la pobreza? Si uno carece de una razón importante entonces sí, se dificulta alcanzar cualquier objetivo.
2. Toma decisiones todos los días: el poder de elegir sobre nuestro futuro se va incrementando con cada dólar que cae en nuestro bolsillo. Primero invierte en educación porque, en realidad, el único activo real con el que cuentas es tu mente.
3. Elige a tus amigos con cuidado: el poder de la asociación. La gente que tiene dinero habla de dinero. Es decir, no presume pero está interesada en el tema. Gracias a eso, puedes aprender de ellos. Advertencia: no escuches a la gente pobre o asustada. El que con lobos anda a aullar se enseña.
4. Domina una fórmula y luego aprende otra nueva: el poder de aprender rápidamente. En vez de usar la frase de eres lo que comes, vamos a usar la de Eres lo que estudias.
5. Págate primero a ti mismo: el poder de la disciplina personal. Sino puedes controlarte a ti mismo, entonces no intentes hacerte rico porque no tiene ningún sentido invertir, ganar dinero y tirarlo a la basura. Cada mes asigna un dinero a tu columna de activos antes de empezar a pagar tus gastos mensuales. No incurras en deudas de consumo.
6. Págale bien a tus asesores: el poder de la asesoría de calidad.
7. Siempre da a cambio de algo: el poder de obtener algo a cambio de nada. La primera pregunta del inversor sofisticado es: ¿con qué rapidez puedo recuperar mi dinero? Por esta razón el ROI, el Retorno sobre la inversión es tan importante.
8. Usa los activos para comprar los lujos. No pagues lujos que te lo paguen tus activos.
9. Elige a tus héroes: el poder de la figura mítica. Los héroes hacen mucho más que inspirarnos. Si ellos pueden nosotros, también.
10. Enseña y recibirás: el poder de dar.
Si yo pudiera hacer que te quedaras con sólo una de las ideas del libro, sería ésta. Cada vez que sientas que no tienes o que te hace falta algo, primero comparte eso mismo que necesitas y se te devolverá a manos llenas. Funciona con el dinero, las sonrisas, el amor, la amistad… Kiyosaki sabe que en muchas ocasiones, lo último que la gente quiere es dar, pero a él siempre le ha servido porque confía en el principio de reciprocidad: doy lo que deseo recibir.
Lección 9: ¿Quieres más? Aquí tienes una lista de acciones por realizar.
- Deja de hacer lo que estás haciendo. No puedes hacer lo mismo una y otra vez y esperar resultados distintos.
- Busca ideas nuevas
- Busca ya a alguien que ya hizo lo que tú quieres hacer.
- Toma clases, lee y asiste a seminarios.
- Visita inmuebles y haz una oferta por muy loca que parezca. Nunca se sabe el precio perfecto de algo si no se hace una oferta.
- Recorre en coche, corre o camina por una zona específica, una vez al mes para ver inversiones.
- Busca gente que quiera comprar y luego busca a gente que quiera vender
- Piensa a lo grande
- Aprende de la historia
- La acción siempre vence a la pasividad.
Muchas gracias por llegar hasta aquí. Espero que te haya brindado algunas reflexiones sobre cómo hacer que el poder del dinero trabaje para ti.
Gracias, gracias, gracias…